Cuando en una región del planeta es de día en otra es de noche, la redención que nos arropará llegará en tiempos de igual condición en el mundo. No será físicamente de día o de noche sino en circunstancias inesperadas de grandes lecciones para el desarrollo del ser humano. La humanidad ascenderá a una nueva consciencia debido a su entendimiento del proceso y es allí donde podrá crear un nuevo mundo. Los mecanismos disponibles son la instrucción y el sufrimiento. Con nuestra elección podremos participar conscientemente de las bendiciones que nuestro Padre ha separado para nosotros. El ser humano con su deseo egoísta elige el camino más difícil para su desarrollo a través del sufrimiento. La instrucción está a nuestra disposición, es el método adecuado y seguro para el desarrollo. Todo a nuestro alrededor en la naturaleza nos instruye a ser un solo organismo. La elección del ser humano determina cuan oscuro o iluminado se encuentra el mundo. Como ladrón en la noche llegará la revelación que moverá globalmente nuestros corazones y la esperanza para forjar un nuevo futuro.